martes, 25 de octubre de 2011

MITOLOGÍA GRIEGA. 3ª PARTE: LAS NINFAS.

Durante la época homérica, se cree que eran hijas de Zeus. Son consideradas divinidades secundarias  a las que se les pueden hacer plegarias, pero que también pueden resultar temibles.
Ellas son doncellas que habitan en el bosque y en el agua. Normalmente se las encuentra en grutas donde se entretienen cantando y bailando. Es común que sean la corte de algún dios o diosa más importante, como Artemisa , o de otra ninfa de más alto nivel, como Calipso o Circe.
Hay diferentes categorías de ninfas de acuerdo con el lugar donde viven:
  • Ninfas de los Fresnos, o Melíades, que parecen ser las más antiguas. Son hijas de Urano. 
  • Las Náyades que viven en las fuentes y las corrientes de agua. Por su parte, las Nereidas son ninfas del mar en calma. 
  • También existen las Oréades, que viven en las montañas 
  •  Las Alseides que habitan en las flores.
Todas las ninfas tuvieron mucha importancia en diversas leyendas. Es común encontrarlas como esposas de algún héroe o semidiós. Además, es frecuente verlas intervenir en los mitos amorosos, donde sus amantes más frecuentes eran los espíritus masculinos de la naturaleza. Pero los grandes dioses no eran la excepción, y varias de ellas se unieron en diversas ocasiones con Zeus (dios de los dioses), Apolo (dios del sol y el arte) y Hermes (mensajero de los dioses), entre otros. De igual forma, era normal que se enamoraran de un adolescente mortal y lo raptaran para compartir su cama con él.


Publicado por: Cristina Mª Angulo Castaño y Mª Carmen López. 


 

jueves, 20 de octubre de 2011

Ser y Movimiento I. El poema filosófico de Parménides

"Ea, pues, que yo voy a contarte (y presta tu atención al relato que me oigas) los únicos caminos de búsqueda que cabe concebir: el uno, el de que es y no es posible que no sea, es ruta de Persuasión, pues acompaña a la Verdad; el otro, el de que no es y el de que es preciso que no sea, este te aseguro que es sendero totalmente inescrutable."
(del Poema del Ser de Parménides, según la versión de Alberto Bernabé)

Contexto

Dentro de la tradición pre-socrática, uno de los momentos más interesantes es la confrontación filosófica entre el pensamiento de Heráclito (que encarna de alguna manera al defensor del movimiento, del cambio) y Parménides (que representa, dentro de la historia de la filosofía, el representante más extremo de la idea de la unidad y la inmutabilidad del ser). Esta confrontación realmente se estableció a posteriori, al representar ambos pensadores dos puntos de vista aparentemente opuestos y ser coetáneos. Aún así resulta matizable, ya que, aunque se supone que ambos pudieron llegar a conocer la obra del otro, parece ser que no mantuvieron ninguna polémica real entre ellos y que, de hecho, el Poema Filosófico de Parménides pretendía más bien criticar aspectos de la doctrina pitagórica, dentro de la cual se había formado.

Para contextualizar el argumento central del pensamiento de Parménides (Elea, 540-470 antes de Cristo), hay que recordar que para los anteriores pensadores presocráticos la multiplicidad es una realidad y hay una idea común que es la búsqueda del uno, del fundamento que otorga ordenamiento a la multiplicidad al que llamaron “arjé”. Es decir, existe la aceptación de que existe algún tipo de realidad objetiva a la cual ha de ceñirse el conocimiento y que puede consistir en un elemento físico, material, como ocurre en la Escuela de Mileto y, en general, entre los filósofos presocráticos o en un elemento inmaterial, como las Ideas de Platón. Pero sea como fuere, la búsqueda del "arjé", de la primera causa objetiva de esa realidad múltiple, determinará las posteriores interpretaciones de lo real

Para Parménides, dicha multiplicidad es una ficción, lo uno es una realidad, es un uno ordenado, homogéneo, inmutable, eterno, finito e ilimitado. Esto se manifiesta en las denominadas tres premisas de Parménides: 1) lo que es es y no puede no ser, lo que no es no es y no puede ser; 2) lo que es puede ser pensado y se puede decir o nombrar de forma verdadera, lo que no es no; 3) lo que es es, es uno y no puede ser muchos.

Reflexiones personales


En la parte del poema que podéis leer en la parte inferior del post, Parmenides expone su doctrina a partir del reconocimiento de dos caminos para acceder al conocimiento: la vía de la verdad y la vía de la opinión. Afirma en el poema la superioridad del conocimiento que se atiene a la reflexión de la razón, frente a la vía de la opinión que parece surgir a partir del conocimiento sensible, que considera ilusorio, apariencia. De alguna manera, se acepta que Parménides introduce la distinción entre razón y sensación, entre verdad y apariencia.

Esta idea básica de Parmenides me resulta clara y relativamente fácil de comprender en un principio, pero su radicalidad la convierte en complicada de asimilar, ya que en última instancia llega a negar cosas como la posibilidad de ningún cambio (el paso del ser al no ser) y a afirmar que lo que no es, no puede ser pensado, ni siquiera "nombrado". Siguiendo la misma línea afirma que el ser es entero y que no puede ser divisible, que es inmóvil y que no puede cambiar de lugar ni morir, lo que resulta muy “chocante”, al enfrentarse por completo a la realidad que todos percibimos a través de nuestros sentidos.

Sin embargo, pese a ese aspecto un tanto “exagerado”, el pensamiento de Parménides introduce un montón de reflexiones que han caracterizado (al menos por lo poco que conozco) la historia de la filosofía y también temas apasionantes que en mayor o menor medida todos nos hemos planteado alguna vez, como la discusión sobre las diferencias entre verdad y opinión, sobre la validez de los distintos puntos de vista o si hay una única verdad inmutable. También anticipa otros temas que se han debatido en muchos otros momentos de la historia de la filosofía como la polémica entre el racionalismo (que también acentuaba el papel de la razón en la adquisición del conocimiento) y el empirismo, que resaltaba el papel de la experiencia y de la percepción.

Fragmento del poema filósofico de Parménides en el que se expone la vía de la verdad, según la versión del filósofo y lingüista Agustín García Calvo en su libro: “Lecturas presocráticas"

Y mención ya sola de vía

queda la de que es. Mas por ella hay puestas señales
Muchas: que, al ser no nacido, es ello imperecedero,
todo en entero igual y sin muda, y bien acabado;
nunca ni fue ni será pues ahora es todo a la una,
uno en sí mismo y continuo. Pues ¿qué nacimiento buscarle?:

¿cómo crecido y de qué?: ni de nada que no sea nada
concebir te dejo o decir (que ni concebible o decible
es que no sea; y ¿qué falta además lo habría lanzado
antes mejor que después del no ser nada a criarse?;
así que lo que es ha de serlo de todo en todo o no serlo)

ni a bien de lo que era una vez habrá fuerza de fe que permita
que nazca algo más que ello mismo. Por tanto, nunca ni hacerse
ni perecer lo ha dejado Justicia aflojando sus hierros,
mas lo retiene. Y el juicio sobre ello está en lo siguiente:
o es o no es. Y juzgado, como es forzoso, ya queda

que una hay que dejar, la sin nombre ni idea (que esa ni vía
es de verdad), y la otra, como es, que así es verdadera.
Y ¿Cómo va luego, en siendo, a morir?, ni ¿Cómo a criarse?:
si se hizo lo que es, no lo es, y si un día va a serlo, tampoco.
Conque el nacer queda así y el incierto morir anulado.
 
Ni es divisible tampoco, pues que es igual todo entero,
ni mas por acá (lo que le impidiera ser uno consigo)
ni por acá algo peor, sino que es de su ser todo lleno;
así que es todo continuo: que, siendo, a lo que es sigue junto.
Mas luego, quieto y sin muda, en linde de recias prisiones

está, sin comienzo, sin cese; que ya el deshacerse y hacerse
lejos se fue a perder y lo echó la fe verdadera.
Y, siendo lo mismo, en lo mismo quedando, yace en sí mismo;
conque firme allí mismo se está: que necesidad poderosa
en las prisiones del cerco lo tiene que todo lo abarca;


que es que no es de ley que lo que es no sea completo:
pues nada le falta; y si no, tendría falta de todo.
Y el idearlo es igual que aquello de que ello es idea:
pues, sin lo que es lo que es, en lo que está titulado,
no encuentras el concebirlo: que cosa no es ni ha de serlo

más que eso es que lo que es, toda vez que su sino lo ha atado
a ser total y quieto. Así que será todo nombres
cuanto han convenido mortales, verdad creídos que era,
lo de que nace y perece, aquello de serlo y no serlo,
lo de cambiar de lugar y mudar las espléndidas tintas.

Mas, como hay un último linde, es cabal y acabado
por doquier, semejante a la masa de bienredonda pelota,
del centro en todo sentido igualado: pues ello ni debe
ser mayor por acá o por acá menor para nada:
que ni nada habrá que, sin ser, pararlo pueda en llegarse

a lo mismo, ni siendo lo habrá, para hacer que fuera de aquende
más de lo que es o allende menor: que es todo sin mengua:
pues, igual por doquier a sí mismo, lo mismo en su límite reina.

Aquí te me paro ya en la razón de fiar y la idea
en torno a verdad.

Publicado por Itaca Molino Martínez

martes, 18 de octubre de 2011

MITOLOGÍA GRIEGA 2º PARTE: LAS SIRENAS.



Las sirenas a diferencia de la costumbre popular, dentro de la tradición griega eran genios marinos, eran mitad mujeres y mitad aves.
Su ascendencia no está clara. Según las versiones más comunes del mito, son hijas de Melpómene y de Aqueloo.
La primera mención que se conoce de las Sirenas es en La Odisea, cuando Odiseo se enfrenta a su canto en el mar. Aquí aparecen sólo dos, pero otras tradiciones hablan de tres: Pisínoe, Agláope , y Telxiepia o incluso de cuatro: Teles, Redne, Molpe, y Telxíope.
De las sirenas se sabe que su especialidad era la música. Se cree que una tocaba la lira, otra cantaba y la otra tocaba la flauta.
Para el poeta y mitógrafo Ovidio, las sirenas no siempre tuvieron esa forma, sino que en un principio eran mujeres muy hermosas compañeras de Perséfone (diosa del mundo subterráneo y compañera de Hades), antes de que fuera raptada por Hades. Cuando sucedió el secuestro, ellas le pidieron a los dioses que les dieran alas para poder ir en busca de su amiga. Otra versión dice que su transformación fue un castigo de Démeter por no defender a su hija de Hades e impedir el secuestro. También se dice que Afrodita les quitó su belleza, por que despreciaban las artes del amor.
Hay una leyenda que cuenta que después de la metamorfosis, rivalizaron con las musas, y éstas muy ofendidas, las desplumaron.
De acuerdo con el mito más difundido, vivían en una isla del Mediterráneo y con la música que tocaban atraían a los marinos, que aturdidos por el sonido, perdían el control del barco que se estrellaba contra los arrecifes. Entonces las Sirenas devoraban a los imprudentes navegantes.
Varios héroes pasaron por su isla sin que les sucediera nada , gracias a ardides o a la ayuda de algún dios. En el caso de los Argonautas, se cuenta que pasaron muy cerca de la isla de las sirenas, pero que Orfeo, que tenía fama de cantar maravillosamente (héroe griego) hizo uso de su talento con tanta armonía y tan melodiosamente, que no las escucharon por lo que se salvaron de su terrible destino. Butes (uno de los argonautas) no pudo soportar la tentación y se lanzó al mar, pero Afrodita lo rescató.
De igual manera, Odiseo , cuando se iban acercando a la isla temida, por consejo de Circe, ordenó a sus hombres que se taparan los oídos con cera, y él que no podía con la curiosidad de escucharlas, se hizo amarrar al mástil, con orden de que pasara lo que pasara, no lo desataran. Al escuchar los cantos de las sirenas quizo soltarse pero sus compañeros no se lo permitieron.

Cuenta la leyenda, que las sirenas derrotadas por su fracaso, se lanzaron al mar y murieron ahogadas.



Realizado por Cristina Angulo y Mª Carmen López.



ESCUELA CÍNICA (CONTINUACIÓN DE LA ENTRADA ANTERIOR)


    Para aquellos que no comprendieron términos de la entrada anterior como “escuela cínica” o simplemente la frase de Hiparquía en la cual decía “seguir a los fuertes perros” aquí tenéis la aclaración para que podáis leer y comprender mejor la entrada expuesta anteriormente.

    Lo principal para comprender la entrada anterior es saber qué es la escuela cínica y qué tiene que ver con la frase que Hiparquía pone en su texto tan peculiar, pues bien, el nombre de la escuela proviene del término griego que significa “perro”, es decir los cínicos pensaban que la felicidad se obtenía llevando una vida acorde con la naturaleza y que el hombre llevaba ya en si mismo todos los elementos necesarios para ser felices.

    El verdadero bien era ser completamente autónomos, de ahí el rechazo de Hiparquía a vestir bien como las mujeres, a calzar como todo el mundo o a dormir en un lecho como el de la mayoría de las personas de aquel tiempo. El fundador de la escuela cínica fue el griego Antístenes.

    Por todo lo dicho podemos explicar la expresión de “seguir a los fuertes perros” como seguir a los cínicos, seguir a los que para ella eran las personas más fuertes.

*Continuaremos con las entradas de mujeres filosóficas próximamente 

martes, 11 de octubre de 2011


HIPARQUÍA DE TRACIA

    Hiparquía, otra de las primeras mujeres que se conocen de la historia de la filosofía, pertenecía a la escuela cínica junto a su marido Crates (discípulo de Diógenes de Sinope) y su hermano Metrocles (Discípulo de su marido Crates y anteriormente discípulo de Teofrasto Peripatético), nacida en Tracia en el siglo II a.C.

    Pertenecía a una familia bien parecida, la cual se negaba a que hiparquía siguiera a la escuela cínica debido a las condiciones de vida que esto implicaba. Se enamoró de Crates, integrante de la escuela cínica, y su familia le impidió el matrimonio haciendo así que ella amenazara con quitarse la vida si no le permitían unirse en matrimonio con su amado.

    Crates intentó por todos los medios (utilizando su aspecto físico ya que era jorobado) que ésta decidiera no estar con él y obedeciera a sus padres, sin éxito, Hiparquía seguía locamente enamorada de él y finalmente se casaron juntos.
Uno de los textos que podemos conservar de la filósofa Hiparquía es el siguiente:

«Yo, Hiparquia, no seguí las costumbres del sexo femenino, sino que con corazón varonil seguí a los fuertes perros. No me gustó el manto sujeto con la fíbula, ni el pie calzado y mi cinta se olvidó del perfume. Voy descalza, con un bastón, un vestido me cubre los miembros y tengo la dura tierra en vez de un lecho. Soy dueña de mi vida para saber tanto y más que las ménades para cazar.»

    En el texto podemos ver claramente la opinión de Hiparquía sobre la mujer filósofa, pero visto desde un aspecto más personal, ella dice que en vez de seguir todas las constumbres a las que las mujeres estaban acostumbradas prefiere sacar su lado masculino y seguir el camino de la enseñanza. 

    Cuenta que tuvo experiencia en la vida como mujer y que no le agradó, prefería ir descalza, con un bastón y sin siquiera un lecho en el que descansar. Prefiere vivir siendo dueña de su vida y aprender todo lo posible.

*Continuaremos más adelante con el resto de mujeres existentes en la historia de la filosofía.

Paso del Mito al Logos

Los mitos eran un conjunto de leyendas y cuentos, que servían para explicar el origen del mundo y las costumbres humanas. Los acontecimientos que narran los mitos ocurren de manera arbitraria, es decir, sometida al capricho y voluntad contradictoria de los dioses, que actuaban movidos por pasiones.

Los mitos eran cosmogonías. Una cosmogonía es una explicación mítica sobre el origen del universo.

Necesidad frente arbitrariedad:
  • Arbitrariedad: Sometida al capricho y voluntad contradictoria de los dioses.
  • Necesidad:  Las cosas ocurren así y no de otra manera, es decir, ocurren según un orden racional y no por capricho de los dioses.
Esta  oposición  entre  arbitrariedad-necesidad es clave  en la aparición de la filosofía. Filosofía como el tránsito del mito al logos. 

MITO DE SATURNO DEVORANDO A SU HIJO.

Saturno es el hijo menor de Coelus, el Cielo, y de la antigua Tellus, la Tierra. Tras derrocar a su padre, Saturno obtuvo de su hermano mayor Titán el favor de reinar en su lugar. Titán puso una condición: que Saturno debía matar a toda su descendencia, para que la sucesión del trono se reservase a sus propios hijos.

Saturno se casó con Ops (Rea), con quien tuvo varios hijos que devoró ávidamente, como había convenido con su hermano. Sabiendo además que un día sería a su vez destronado por uno de sus hijos, exigía a su esposa que le diese a los recién nacidos. Sin embargo, Ops logró salvar a Júpiter. Éste, una vez adulto, hizo la guerra a su padre, derrotándole y expulsándole del cielo. Así la dinastía de Saturno perduró en detrimento de la de Titán.

 
Se dice que Saturno quedó reducido a la condición de simple mortal, yendo a refugiarse al Lacio, donde puso orden entre los hombres salvajes y les dio leyes.

martes, 4 de octubre de 2011

Mitología griega: LA DIOSA AFRODITA.


Afrodita (en Ἀφροδίτη) es, en la mitología griega, la diosa del amor, la lujuria, la belleza, la sexualidad y la reprodución. Aunque a menudo se alude a ella en la cultura moderna como «la diosa del amor», es importante señalar que normalmente no era el amor en el sentido cristiano o romántico, sino específicamente la atracción física o sexual. Su equivalente romana es la diosa Venus.
Se decía que Afrodita podía hacer que cualquier hombre se enamorase de ella con solo poner sus ojos en él.
Afrodita estaba asociada y era con frecuencia representada con el mar, los delfines, las palomas de granada, manzana, mirto, rosa y lima.

Para finales del siglo V a. C. los filósofos habrían separado Afrodita en dos diosas diferentes:
Afrodita Urania y Afrodia Pandemos.
Afrodita Urania representando el amor del cuerpo y el alma, mientras Afrodita Pandemos estaba asociada con el mero amor físico.
Por esto, según Platón Afrodita es dos diosas, una vieja y la otra joven. La mayor, Urania y la menor se llama Pandemos.

Un aspecto universal del culto de Afrodita y sus predecesoras que muchos mitógrafos de los siglos XIX y XX han omitido es la práctica de la prostitución religiosa en sus santuarios y templos.
Afrodita no tuvo infancia: en todas las imágenes y referencias nació adulta, núbil e infinitamente deseable. Debido a su inmensa belleza, Zeus temía que Afrodita fuera la causa de violencia entre los otros dioses. Por ello la casó con Hefesto, el severo y malhumorado dios del fuego y la fragua. La infelicidad de Afrodita con su matrimonio hizo que buscase la compañía de otros, normalmente Ares, pero también Adonis. Hefesto fue informado del adulterio que su esposa mantenía con Ares por Helios. Como venganza, atrapó ingeniosamente a Ares y Afrodita con una red de finas cadenas que había dispuesto sobre el lecho para que cayeran al más mínimo contacto. Entonces llamó a todos los demás dioses olímpicos para burlarse de ellos.
La diosa fue especialmente conocida por sus maldiciones e iras, pues cuando alguien caía en la desgracia de ofender a la diosa, se condenaba a tormentos terribles. Por ejemplo, castigó a la Aurora con un amor irrefrenable por Orión, ya que había cedido a las seducciones de Ares. También castigó a todas las mujeres de Lemnos, ya que éstas no la honraban, y las impregnó con un olor insoportable que provocó que sus hombres las abandonaran. De igual manera castigó a las hijas de Cíniras y las obligó a prostituirse con extranjeros.
Caer en su gracia era igual o más peligroso. Cuando la Discordia lanzó una manzana a la más hermosa de las diosas, e hizo que compitieran Afrodita, Palas Atenea y Hera, y Zeus decidió que fuera Alejandro (Paris, héroe troyano) el que definiera quién era la más hermosa, cada una le ofreció un regalo a cambio de que la escogiera. Palas Atenea le ofreció hacerlo invencible en la guerra, Hera le prometió el reino del universo, y Afrodita la mano de Helena (hija de Zeus y hermana de los Dioscuros), quien era la mujer más hermosa del mundo. Paris eligió a Afrodita y fue por esta promesa que se inició la famosa Guerra de Troya.
Afrodita agradecida con Paris, lo protegió durante toda la campaña así como a los demás aqueos, incluyendo a su hijo Eneas, a quien logró salvar de la muerte.
Aunque Troya iba a perder la guerra definitivamente, Afrodita logró rescatar la raza de los aqueos con su hijo Eneas, quien luego viajara a una tierra desconocida donde sus descendientes Rómulo y Remo fundarían Roma.
Los animales favoritos de esta diosa eran las palomas, y estas aves arrastraban su carro. Sus plantas eran la rosa y el mirto.
  
Realizado por: Cristina Angulo y MªCarmen López. 







LAS MUJERES EN LA FILOSOFÍA


    El papel de la mujer en la filosofía es un tema que hay que tratar y valorar. En todas las épocas han existido mujeres dedicadas a la filosofía, aunque su pensamiento ha estado silenciado o bien se ha transmitido de manera fragmentaria, como consecuencia de los condicionamientos sociales y culturales que han llevado a la mujer a un segundo plano respecto al hombre.

    Las primeras mujeres filosóficas que se conocen estuvieron vinculadas a la escuela pitagórica, pero sus pensamientos fueron atribuidos a su fundador Pitágoras. 
    
    Unas de las filosofas de esta época fue Aspasia de Mileto vivió en la Atenas de la época del político Pericles y estuvo unida a él. Fue también conocida por sus enseñanzas sobre retórica y logógrafa. 

    No se sabe exactamente a cuántos políticos pudo influir, pero si sabemos que fue mencionada por Platón, Aristófanes y Jenofonte en sus escritos de la época y que tal vez pudo haber dirigido un burdel y ser conocida como hetera (nombre que recibían las cortesanas de la antigua Grecia) según algunos escritos, que a su vez son criticados por muchos otros autores que afirman que los escritores de esos escritos pretendían difamar a Pericles.

    Otros investigadores afirman que podría haber estado casada con Pericles ya que tuvo un hijo suyo (Pericles el joven) el cual acudió a la academia militar ateniense y más tarde fue ejecutado en la batalla de Arginusas. Actualmente se cree que Aspasia trás la muerte de su “marido” (Pericles) se convirtió en amante de otro político ateniense, Lisicles.

*Continuaremos más adelante con el resto de mujeres existentes en la historia de la filosofía.

Pitágoras

Pitágoras vivió en el siglo VI A.C en una Isla llamada Samos. Pitágoras fundó una especie de secta filosófica-religiosa dedicadas al estudio de las matemáticas, su doctrinas eran secretas. Esta secta se desarrollo en el Sur de Italia.
La realidad entera tiene una estructura matemática y la naturaleza sigue leyes matemáticas. Muchos pensadores van a adoptar esta idea y la defenderán. Llegan a esta conclusión porque se dan cuenta que muchos fenómenos pueden ser analizados por medio de los matemáticos. Por ejemplo, el movimiento de los planetas, el periodo de gestación en las diferentes especies, etc. Así llegaron a la conclusión de que el arché debía ser el número. Hemos de tener en cuenta que para los Pitágoricos el número era al mismo tiempo, un punto y pensaban que estaban dotado de extensión física. Aliaban los números con figuras geométricas. El dos (una línea), el tres (un triángulo), el cuatro (un cuadrado), etc.
Los Pitágoricos están muy influidos por una secta religiosa, que eran los Órficos. Estos eran los seguidores o adoradores del Dios Orfo, el Dios de la música. Tenían una idea parecida a la de los Pitágoricos.
Según Pitágoras el ser humano, esta formado de alma y cuerpo. El alma es la parte inmoral, pura, racional y se identifica con la razón. El cuerpo es mortal, impura e irracional, que esta relacionado con las pasiones y con lo sucio. Cuando alguien muere, el alma escapa del cuerpo y se reencarna en otro cuerpo de alguien que esta naciendo en ese momento. El ciclo de las reencarnaciones dura hasta que el alma se purifica completamente.
Pitágoras creía que el estudio de las matemáticas sería para purificar el alma. <<El cuerpo es la tumba del alma>>,dijo Pitágoras.

LOS SOFISTAS


LOS SOFISTAS
"La verdadera sabiduría esta en reconocer la propia ignorancia" (Sócrates)
Los sofistas eran los sabios primitivos que a partir de Sócrates y Platón perdieron su prestigio, siendo designados con este nombre en sentido negativo.
Eran pensadores que en el siglo V antes de Cristo se dedicaban a enseñar principalmente retórica, o sea el arte de hablar bien y de la erística, o arte de persuadir y convencer.
El objetivo de los sofistas era darle la formación a los jóvenes, que ellos consideraban necesaria, para dedicarse a la política.
El sofismo representa el fin del período llamado cosmológico, en que la inquietud del saber se centraba en la naturaleza, y el inicio del período antropológico, centrado en el hombre.
La inestable situación política de Grecia obligaba al ciudadano libre a intervenir más en los asuntos del Estado en virtud de la disparidad de las doctrinas filosóficas existentes.
Los sofistas no creían en el ideal de la verdad absoluta y priorizaban el concepto de utilidad, enseñando la virtud como la capacidad de ser eficaz en política.
Para el sofismo toda moral y cultura proviene del hombre. Creían en el carácter funcional del lenguaje y en que no existe un conocimiento válido y necesario, y esta forma de pensar los convirtió en los primeros en incursionar en una teoría del conocimiento. Protágoras, el más notable de los sofistas, se ocupaba del microcosmos más que del macrocosmos, o sea del hombre, como el misterio más grande, su civilización y sus costumbres. El sofismo también se diferenció de la filosofía griega por su método, ya que aunque la vieja filosofía no excluía la observación empírica era típicamente deductiva, o sea que una vez que el sabio tenía un principio constitutivo general del mundo debía explicar a partir de él los fenómenos concretos. En tanto que los sofistas trataban de reunir una gran cantidad de observaciones de hechos particulares para sacar conclusiones, tanto teóricas como prácticas, siendo su método por lo tanto, empírico inductivo. El método sofista más cuestionado era la enseñanza de la erística o el arte de persuadir y ganar las controversias, principalmente en lo concerniente a ganar los litigios judiciales. El sofismo sirvió de transición a la fase de la filosofía de Platón y Aristóteles que siempre los consideraron en negativa.